Si tienes un negocio o eres freelance, es probable que cuentes (o pienses en contar) con un contador. Y eso es excelente: los contadores son aliados fundamentales para mantenerte al día con impuestos y obligaciones legales.
Pero hay algo que muchos no dicen: no todo lo que crees sobre el trabajo de tu contador es cierto. Hay ideas populares que te pueden costar dinero, tiempo o incluso la supervivencia de tu empresa.
Hoy vamos a desmontar 3 mitos que tu contador difícilmente te contará de frente y que conviene tener muy claros para gestionar mejor tus finanzas.
Mito 1: “El contador se encarga de tus finanzas”
“No puedes administrar lo que no puedes medir.” — Peter Drucker
Análisis:
Mucha gente piensa que tener un contador es “resolver sus finanzas”. Error. El contador suele encargarse de la contabilidad formal y el cumplimiento fiscal, pero la gestión financiera de tu negocio sigue siendo tu responsabilidad.
El contador registra transacciones, presenta declaraciones y ayuda con informes, pero:
- No hace tu presupuesto mensual.
- No toma decisiones sobre gastos o inversiones.
- No gestiona tu flujo de caja.
- No define tu estrategia de precios.
Perspectiva:
Ver al contador como un “gerente financiero externo” es peligroso. Termina en desorden, falta de liquidez y sorpresas en impuestos.
✅ Lo que deberías hacer:
- Usar a tu contador como aliado técnico y consultor.
- Mantenerte informado de tus números.
- Elaborar tu presupuesto y plan financiero básico.
Cita útil:
“Los números contables no son el negocio, son el lenguaje del negocio.” — Warren Buffett
Mito 2: “Si declaro menos, pago menos impuestos y es mejor”
“Nada es más costoso que hacer negocios en la oscuridad.” — Autor desconocido
Análisis:
Es un mito (y un mal consejo) muy popular: declarar menos ingresos para reducir impuestos. Algunos contadores, de forma tácita o directa, lo sugieren como una forma de “ahorrar”.
En realidad:
- Te limita para solicitar créditos o inversión.
- Afecta tu capacidad de crecer formalmente.
- Te expone a sanciones, multas o auditorías.
Perspectiva:
El “ahorro” fiscal a corto plazo es un lastre a largo plazo. Un negocio que declara poco es menos confiable para bancos, inversionistas o incluso clientes grandes.
✅ Lo que deberías hacer:
- Construir un historial financiero limpio y sólido.
- Optimizar impuestos legalmente, pero no ocultarlos.
- Invertir en formalidad como activo estratégico.
Cita útil:
“La evasión es el arte de hoy que arruina el negocio del mañana.” — Versión popular de un dicho contable
Mito 3: “Solo necesitas al contador en la época de impuestos”
“El mejor momento para arreglar el techo es cuando brilla el sol.” — John F. Kennedy
Análisis:
Muchos emprendedores solo llaman al contador en abril o cuando toca presentar declaraciones. El resto del año, las finanzas se dejan al azar.
Eso es un error por dos razones:
1️⃣ Pierdes visibilidad: no sabes tu flujo de caja, tu rentabilidad ni tus márgenes reales.
2️⃣ Pierdes oportunidades: un contador informado puede alertarte sobre créditos fiscales, deducciones o cambios regulatorios.
Perspectiva:
El contador no es solo para “pagar impuestos”, sino para ayudarte a planificar. Pero no todos los contadores insisten en esta parte proactiva: muchos cumplen con el mínimo que les pagas.
✅ Lo que deberías hacer:
- Tener reuniones periódicas (trimestrales o mensuales).
- Revisar informes básicos: flujo de caja, balances.
- Pedir análisis, no solo reportes.
Cita útil:
“Un presupuesto es decirle a tu dinero a dónde ir, en lugar de preguntar adónde se fue.” — John C. Maxwell
Tu contador es una pieza clave de tu negocio. Pero no esperes que haga magia o tome por ti decisiones que solo tú puedes tomar.
Desmontar estos mitos no es para desconfiar de ellos, sino para trabajar mejor juntos. Usa su experiencia, pero asume tu responsabilidad como dueño o director de tu emprendimiento.
Porque al final del día, nadie cuidará tu dinero como tú.
